Con más neoyorquinos detrás del volante al final del confinamiento, los robos de autos se han incrementado 81% en NYC desde 2020 y mucho más (277%) frente a 2019, antes de la pandemia.
Al 19 de septiembre se habían reportado 324 autos robados en lo que va del año, en comparación con 179 en el mismo período de 2020. El número representa un enorme aumento del 277% desde 2019, cuando los datos del Departamento de Policía de Nueva York mostraron sólo 86 casos.
“Son oportunistas que se aprovechan de un delito de bajo riesgo y alta recompensa con pocas o ninguna consecuencia”, comentó al New York Post Joseph Giacalone, profesor adjunto del John Jay College of Criminal Justice y ex sargento de NYPD. “Los perpetradores saben que la policía rara vez puede perseguirlos y esto los envalentona aún más. Si incluso los atrapan, (salen sin) fianza. Es un ganar-ganar para los malos”.
Los robos a menudo ocurren cuando las llaves se dejan en los automóviles o los conductores descuidan sus vehículos con el motor en marcha, advierte NYPD. En 2020 la policía definió un “grupo demográfico más joven”: más ladrones menores de 18 años. Este año, los cinco primeros modelos de autos en la mira son, en orden: Ford Econoline, Honda Accord, Honda CRV, Toyota Camry y Honda Civic.
NYPD ha reportado un aumento en el número de autos robados desde principios de año. Los casos varían en dramatismo y algunos terminan en persecuciones y accidentes: en junio un vehículo diplomático del cónsul general de Qatar en Nueva York fue sustraído en Midtown East Manhattan por un ladrón que luego se estrelló contra varios autos y un restaurante extendido al aire libre por la pandemia. Días después, se llevaron una ambulancia parada frente al hospital Mount Sinai West en Hell’s Kitchen.
Más tarde, en julio los policías frustraron a un ladrón en Sunset Park, Brooklyn, que se escapó con un niño de 2 años en la parte de atrás del auto. El menor estuvo desaparecido durante más de una hora, hasta ser encontrado ileso cerca de Brooklyn Bridge Park, donde el sospechoso fue arrestado.
En otro caso dramático, hace una semanas un hombre detrás del volante de un BMW 328i, que puede venderse por más de $30,000 dólares, fue bajado de su vehículo y golpeado por una banda de ladrones armados que viajaban en motocicletas en Inwood.
Los robos de piezas de automóviles también se han disparado en todo el país desde la pandemia del coronavirus. La semana pasada, un presunto ladrón murió cuando un automóvil le cayó encima después de haberlo levantado para robar un convertidor catalítico en Harrison (NY).