Muchos cancelados en este Gobierno siguen irritados porque no les han pagado sus prestaciones laborales, y este martes un grupo de ellos protestó a pleno pulmón en los alrededores del Palacio Nacional, donde exigieron el pago de su sudor después de pasar años laborando en la Administración pública.
El grueso de los manifestantes eran desvinculados -como ahora se les denomina- del Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM) y del Instituto Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia (Inaipi); algunos declararon que pasaron hasta 16 y más años trabajando en esas entidades.
La vocera de ellos, Isabel Perdomo Jiménez, señaló que agotó 20 años de trabajo ininterrumpido en el MICM, desempeñándose como inspectora de plantas en el sector capitaleño de Cristo Rey. Además desmintió al MICM afirmando que ellos sí trabajaban y que no eran “botellas”, como han dicho funcionarios de esa institución.
Ella también destacó que fueron más de 5 mil 700 los cancelados en el MICM, y llamó a las autoridades a disponer del pago y resolver la situación.
Otra manifestante, Guillermina Galván, apuntó que algunos hasta se enfermaron de tanto trabajar y exigió el pago inmediato de lo acumulado en esos años de dura faena.
Los reclamantes procedían de diversos puntos: el Gran Santo Domingo, Higüey, otros.
El señor Pedro Mota mostró una certificación laboral despachada por el MICM, en la que consta que el hombre trabajaba en la institución, lo que demuestra que no era “botella” pues duró 13 años de labores.
Para él es un despropósito pretender ahora desconocer el sudor que dejó allí.-